Me encantan las clases, siento que realmente aprendo porque fue un trabajo muy progresivo, la exigencia de las clases (que fuimos de menos a más) me ayudó bastante a internalizar las posturas, movimientos, etc. Además el ambiente de la clase es muy cómodo, nadie te juzga, tus correcciones Joss son siempre de buena manera y no te hacen sentir mal. Siento que com las clases también he generado un "ojo más critico" conmigo en como bailo y en ta disciplina, además de ver en obras de ballet o vídeos como hay ciertas cosas están mal hechas o digo "oooh eso lo dijo Joss, sé que es".
Ver más
Ver menos